Sabemos que los culpables del envejecimiento son, entre otros factores, las sustancias químicamente agresivas que absorbemos del medio ambiente como la radiación ultravioleta y la contaminación ambiental, que provocan la formación de los llamados radicales libres; pero existen también otros factores que se combinan como el estilo de vida, la herencia, la nutrición, el estrés, el trabajo físico y mental, etc., todo ello va provocando un desgaste del organismo. Es por eso que la oxigenación hiperbárica juega un papel importante en la reversión de tales daños, debido a los beneficios que proporciona al reactivar varios procesos biológicos.
Envejecimiento y colágeno
Con la edad, la producción de colágeno se ralentiza y las estructuras celulares se debilitan. La piel se hace más delgada y es más fácil de dañar, el pelo se vuelve sin vida, la piel se hunde y arruga, los tendones y los ligamentos se vuelven menos elásticos, las articulaciones se endurecen, etc. Es el ciclo de la vida, incluyendo el de la vida celular, y no podemos evitarlo, sin embargo, por medio de la OHB podemos retardar estos cambios debido a los siguientes beneficios: